Divino Planeta

Divino Planeta

miércoles, 30 de junio de 2010

La gratitud te lo entregara...




La gratitud es el arte de apreciar. El apreciar lo que el universo te entrega diariamente es una manera importante para suavizar tu vibración, para bajar la resistencia y permitir que el universo te entregue todo lo que tiene reservado para ti. Además de esto, cuando aprecias lo que tienes a tu alderedor, le estas ofreciendo vibraciones positivas al Universo, mismas que te devolverá con creces, pues recuerda que el punto en el que estas vibrando, es tu punto de atracción. Cuando tú conscientemente decides ver el lado positivo a todo y a todos, tu vibración comienza a cantar, y canta cada vez con más fuerza en lo positivo de tu entorno.

Esencia

Gratitud pg 75
El Universo a Tus Pies
Graciela Zozaya

viernes, 25 de junio de 2010

Siempre te escucha....




Mira, el Universo esta siempre ahi, el Universo esta siempre escuchando, y el Universo siente tu vibracion y la empareja con vibraciones similares mas practicas y mas intensas de lo mismo. Pero el Universo no se detendra¡ a pensar si quisiste decir que te gustaba, o lo que no, solo puede sentir que enfocas energia preciosa en algo y asi, siendo el Dios que eres, te debe ser concedido.

Esencia
El 17 de julio de 2009

lunes, 21 de junio de 2010

Tu eliges las vibraciones....




Tú eres el dueño de tu propio universo, de tu propia realidad, y nadie, absolutamente nadie, puede crear en tu realidad a menos que tú se lo permitas. Con eso queremos decir que tú decides cuales son las vibraciones que deseas incluir dentro de la tuya y cuáles no. Es tu desición. Tú siempre tienes la última palabra.

Esencia

El Proceso Creativo pg 37
El Universo a Tus Pies
Graciela Zozaya

miércoles, 16 de junio de 2010

Beneficios de una carcajada






Reír refuerza el sistema inmunológico, disminuye el estrés y ayuda a tolerar el dolor

REÍRSE ESTIMULA LA CREATIVIDAD

Científicos de la Universidad de Harvard indujeron a la risa a un grupo de empleados, comprobando que produce un aumento en la capacidad para trabajar en equipo, resolver problemas y liderar grupos.

Los músculos se relajan, los ojos están entrecerrados y el cuerpo se oxigena más. La risa surge incontenible y provoca un estado de placer que resulta muy beneficioso para la salud mental y física de las personas. Se trata de una idea que ya manejan algunos expertos de la salud, pero que se masifica cada vez más gracias a nuevos estudios que ayudan a confirmar la importancia de tener buen humor para el desarrollo personal en todas las áreas de la vida, incluyendo el trabajo.

El trabajo más reciente fue realizado por el experto en comportamiento organizacional de la Universidad de Harvard, Allan Filipowicz. El investigador sometió a un grupo de trabajadores a un llamativo experimento: observar películas como "Mentiroso, mentiroso" y series televisivas como "El Show de Bill Cosby". A modo de comparación, a otro grupo le pidió que vieran películas de drama o acción, que no causaron risa entre los espectadores.

El resultado fue sorprendente: quienes observaron comedias demostraron en el trabajo un mayor grado de asertividad, iniciativa y creatividad para solucionar problemas comunes, en comparación con aquellos que vieron películas normales.

Para la sicóloga Ximena Santa Cruz, este fenómeno se explica porque "cuando uno se conecta con sus emociones, en este caso la alegría y el júbilo, se produce una descarga energética importante. La persona descansa de la actividad exclusivamente intelectual y eso ayuda a que enfrente su trabajo con mayor optimismo y creatividad"

LÍDERES SONRIENTES

También se ha visto que aquellos que tienen facilidad para contar chistes y hacer reír a los demás, producen una mayor empatía frente al resto de los trabajadores, entran en un terreno de mayor confianza y presentan excelentes habilidades para ser buenos líderes.

Esto se debe a que una persona que demuestra su felicidad proyecta cosas positivas en su entorno, ayudando a que el resto lo vea como un interlocutor válido y cercano, ideal para dirigir grupos humanos.

En cambio, los que andan con cara larga y no se les asoman ni los dientes más bien provocan rechazo y desconfianza.

Santa Cruz señala que son muchos los beneficios de la risa. El problema es que por una razón cultural aquellos que lo hacen mucho son vistos como irracionales o tildados simplemente de tontos: "Cuando niño uno se ríe de cualquier cosa, pero a medida que vamos creciendo perdemos esa capacidad y nos cuesta más disfrutar y reír".

AUMENTA LAS DEFENSAS. TAMBIÉN HAY BENEFICIOS EN EL SISTEMA INMUNOLÓGICO.

Guillermo Ormeño, fisiólogo de la Universidad de Chile, explica que la risa "permite que aumenten los niveles de células T, responsables de defender al organismo de distintos virus y bacterias".

El profesional agrega que con la risa los músculos se relajan y presentan una mejor fisiología. Esto permite una mayor irrigación sanguínea, que ayuda a eliminar los catabolitos o puntos en tensión que se suelen acumular en el cuello y la espalda.

La sicofisióloga Susana Bloch confirma los beneficios del buen humor. Explica que el hábito universal de reírse "permite la liberación en el cerebro de sustancias como las catecolaminas, asociadas al placer y la felicidad".

En todo caso, aclara que para un efecto realmente positivo, la risa debe ser verdadera y surgir en forma espontánea. Esta profesional trabaja en Chile con una innovadora terapia relacionada con las emociones llamada alba emoting. Uno de los ejercicios consiste en inducir risa a los pacientes, logrando la postura y respiración de una persona feliz.

A través de estos ejercicios, se busca que la persona desarrolle una carcajada reponedora y real, porque de lo contrario puede traer efectos adversos. Si la risa es nerviosa o está provocada por emociones encontradas, puede surgir la carcajada histérica que, más que relajar el cuerpo, aumenta el estrés y la sensación de agobio

LOS BENEFICIOS DE UNA CARCAJADA.

Los expertos en la salud recomiendan la risa como una novedosa terapia para vencer el dolor y estar en mejores condiciones inmunológicas para enfrentar el ataque de las enfermedades: La risa libera catecolaminas, neurotransmisores asociados al placer y la felicidad, lo que ayuda a combatir la depresión y la pérdida de sentido de la vida, especialmente en el caso de personas con trastornos del ánimo.

También se ha registrado mediante experimentos clínicos que el buen humor fortalece el sistema inmunológico, al aumentar los niveles de células T dentro del organismo.

Tal como sucede con las caricias, las carcajadas liberan endorfinas, analgésicos naturales del cuerpo que permiten disminuir el dolor o los síntomas de las enfermedades catastróficas.

En el ambiente laboral, la risa ayuda a combatir la tensión o estrés, permite que los músculos se relajen y que la persona se distraiga pensando en cosas más agradables.

Es un buen ejercicio físico, ya que aumenta la actividad del diafragma, el tórax y los pulmones

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Risoterapia




“Reírse es algo serio”

Vivimos en una época bastante ajetreada con tensiones de todo tipo: exámenes, preocupaciones personales, paro, estrés... Todas estas cosas nos provocan situaciones de malhumor que descargamos con los demás, a menudo con los que menos culpa tienen. Por eso queremos presentaros una dinámica terapéutica denominada “Risoterapia” que libera tensiones y te da la oportunidad de relajarte y aprender a sobrellevar la vida diaria.

La risa y el buen humor nos proporcionan salud física y mental. María Milans del Bosch especialista en Dinámica y Terapia de la risa nos explica en qué consiste esta práctica milenaria.

Entrevista a María Milán del Bosch

¿En qué consiste la Risoterapia?

De manera general, se puede decir que la risoterapia es una disciplina grupal que mediante distintas técnicas nos dispone física y emocionalmente para la risa.
Es un método que puede ayudar a las personas a saber afrontar mejor la vida cambiando la forma de pensar, de negativa a positiva. El estado emocional y la percepción se transforman gracias al desarrollo de la alegría, el optimismo y el humor.

El principal objetivo de la risoterapia es enseñar a reír, es decir, que la persona aprenda ha reír de verdad en aquellos momentos que más necesitan, en momentos de crisis (enfados, problemas, etc.) Esta risa debe ser una risa que nazca del interior y se refleje llana, amplia y francamente.

En definitiva, es una dinámica que nos ayuda a desarrollar estrategias para fomentar nuestro desarrollo y crecimiento personal (mejora de la autoestima, la autoconfianza, satisfacción y bienestar personal, etc.)

¿Cuándo empezó a realizar esta terapia? ¿y con qué fin?

Hace aproximadamente dos años y coincidiendo con una época en la que una persona cercana a mí pasaba por unos momentos difíciles que la llevaron a una situación de tristeza, desgana y falta de energía, tuve la ocasión de leer un artículo de prensa cuyo título decía: “Ríete ,es la mejor terapia. Al reír liberamos endorfinas, la hormona de la felicidad”.

A partir de ese momento empecé a investigar el tema de la Risoterapia, a indagar qué Centros de Formación o Escuelas especificas en España ofrecían esa formación que complementara mi formación como maestra y pedagoga. A nivel profesional me interesaba muchísimo, pero sobre todo a nivel personal. “La Risa encierra un tesoro” pensé, “¿Por qué no descubrirlo y aprovecharlo?

Entre los meses de julio y octubre de 2003 puede desarrollar Talleres de Risoterapia en colaboración con la Escuela de Salud Inteligente de Barcelona y unas profesionales de las Palmas de Gran Canaria, que siendo maestras de primaria, imparten durante los fines de semana talleres de risoterapia para colectivos diversos.

¿En qué lugares realiza su trabajo?

Actualmente estamos desarrollando sesiones y talleres de Risoterapia en Centros Sociales a través de distintos Ayuntamientos, en Colegios e Institutos que se han interesado y en las instalaciones del propio Centro Asturiano de Risoterapia (C/Cimadevilla, 15, Oviedo. 985204674) a grupos de particulares con los que estamos formando grupos.

Además tenemos en proyecto promocionar y desarrollar estos talleres en: Centros juveniles de ocio y tiempo libre, centros de día para ancianos, centros y asociaciones de alcohólicos anónimos, centro de acogida para mujeres y niños, centros de atención a personas con drogodependencia, aulas hospitalarias, asociaciones socio-culturales diversas, y empresas a través de recursos humanos.

¿Qué propiedades tiene la risa para nuestra salud?


Las propiedades que la risa tiene para nuestra salud son muy numerosas. Ahora bien, es importante tener muy claro que la risa no es curativa sino terapéutica. La risa por sí sola no cura, pero sí es una buena terapia complementaria a la medicina tradicional, ahora veremos las razones.

A través de la risa:

-Hacemos ejercicio físico: ponemos en marcha unos 400 músculos, incluidos algunos del estómago que sólo ejercitas con la risa.

-Nos ayuda a relajarnos: los huesos de la columna vertebral y las cervicales, donde solemos acumular las tensiones, se estiran.

-Limpiamos nuestros ojos: las carcajadas hacen vibrar la cabeza, despejan la nariz y el oído y activan nuestras glándulas lagrimales( con una buena carcajada es sencillo que nos lloren los ojos).

-Oxigenamos nuestros pulmones: entra el doble de aire en los pulmones( habitualmente introducimos 6 litros de aire, con una carcajada logramos introducir hasta 12) y la piel se oxigena más.

-Nos ayuda a estar más felices: activa el sistema neuroendocrino favoreciendo la producción de neurotransmisores o mediadores en el cerebro, que ayudan a un buen equilibrio psíquico de la persona. Provoca gran serenidad, reduce la ansiedad, el estrés y aumenta la creatividad.

-Mejora nuestra calidad de vida: la risa estimula el sistema nervioso y éste como respuesta una serie de sustancias, hormonas, que actúan sobre el sistema inmune fortaleciéndolo( estrés, ansiedad, depresión, etc).

¿Cuáles son las edades recomendadas para este tipo de terapia?

Esta terapia está dirigida para todas aquellas personas, sin límite de edad, que quieran participar de ella y experimentar en ellos mismos los resultados sin necesidad de estar enfermo o en una situación de riesgo(estrés, ansiedad, depresión, etc).

¿De qué actividades consta esta terapia?

La metodología que seguimos para desarrollar las sesiones y talleres de Risoterapia se basa en la dinámica de grupos. Hacemos: estiramientos (mediante el movimiento, se desbloquea el cuerpo y se relaja), comunicación (ejercicios de comunicación verbal y no verbal) con el fin de desinhibirse y crear complicidad entre los participantes, juegos musicales (la práctica de diversos juegos con los que se busca diversión y volver a la infancia).

Cuándo la gente oye el nombre de su profesión, ¿les produce risa o asombro?

Sí, la propia palabra parece “mágica”. Cuando tengo que decir que soy especialista en la dinámica y terapia de la risa, lo primero que suele hacer la gente es sonreír y mirarme con gesto de asombro e incredulidad, luego me preguntan.

¿Ha podido comprobar si una persona después de varias sesiones mejora?

Sí; tras varias sesiones hay personas que superan dolores crónicos de espalda producidos por el estrés y la tensión de trabajo, a personas que han encontrado en la risa su mejor aliada para combatir el insomnio, hasta personas que han conseguido superar situaciones relacionadas con los complejos, miedos a no ser aceptados por los demás, baja autoestima, etc.

La risa es muy gratificante, entre otras cosas, porque notas sus efectos a partir de la primera sesión.

¿La Risoterapia es algo novedoso o se lleva haciendo desde hace muchos años?
La risa es tan antigua como el ser humano. Lo que ha ocurrido es que a partir de mediados del siglo asado (1970) fue cuando se empezó a investigar científicamente los beneficios que risa generaba en nuestro organismo, tanto a nivel físico como mental.

Ya en el antiguo imperio chino hace más de 4000 años y en la India había unos templos donde las personas se reunían con la finalidad de equilibrar la salud. Ellos no conocían los motivos científicos pero sí percibían que la risa les ayudaba a estar más fuertes.

Pero fue Norman Cousin (EEUU) en la década de los 70 quien experimentó en sí mismo la risoterapia para superar los dolores de artritis reumatoide. Comprobó que si antes de acostarse se veía una película que durante 2 horas le hacía reír, dormía la noche entera sin dolor. La risa se convirtió en su mejor calmante y relajante.
A partir de este momento se marca un antes y un después en la aplicación de la risa como terapia.

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miércoles, 9 de junio de 2010

Sanando la Ira




CAPÍTULO 8
Stuart Wilde

No puedes desarrollar la ligereza de Ser sin sanar, tarde o temprano, tu ira. Por tanto ¡libérate pronto de ella!

Como dije en mi libro Whispering Winds of Change, todo enfado proviene de un sentido inminente de pérdida o bien de una pérdida real.

Cuando el ego tiene parte de su importancia invertida en cosas materiales, tomará la desaparición de éstas como una afrenta. Así que cuando el aparato de música desaparece, el ego sentirá que una parte de sí mismo ha sido robada. Gritará y renegará se queda mirando largo rato hacia el hueco sobre la alfombra donde algún día estuvo el estéreo.

En vez de eso, podrías entender y aceptar que el estéreo no es realmente una parte de ti. Podrías silbar tu canción favorita y decirte a ti mismo: “¡Ah, ya veo que han venido a por el estéreo!”

A menudo la ira surge de pérdidas que no son tangibles, por ejemplo, la pérdida de importancia o estatus, la pérdida de seguridad, de un ritmo familiar, de oportunidades, y un montón de otras pérdidas, posible o reales. A menudo, el enfado se genera en base a la posibilidad de una pérdida más que a una pérdida sufrida realmente. A menudo la pérdida nunca se materializa. Es el mero pensamiento de su posibilidad el que te pone de los nervios.

La respuesta es no apegarse con demasiada fuerza a las posesiones y a las circunstancias fallares de tu vida. Si sufres una pérdida, sólo acéptala, estate de acuerdo con sufrir la pérdida. Generalmente, cuando las cosas se retiran de tu vida, parece traumático inicialmente, pero, a largo plazo, es, a menudo, una ayuda. Hay un proceso espiritual profundo que te mantiene ligero, despejado, humilde. Es el proceso que se lleva las cosas. Permíteselo. Agradécele por garantizar tu libertad. Ahora no has de preocuparte por si te roban el estéreo, porque no tienes uno del que preocuparte.

Cuando has aceptado la pérdida, cualquiera que sea la cosa que has perdido, puedes, si quieres, poner en marcha un plan para recuperar esa cosa o condición. Pero, antes de empezar, asegúrate que el producto merece la pena el esfuerzo. La gente se obsesiona con el punto de vista del ego acerca de la justicia. El ego los aprisiona.

Siempre me hacen reír esas historias de gente que se gastó cinco años y medio millón de dólares yendo a los tribunales por algún asunto trivial: y finalmente, cuando el juez les da la razón, les dan un dólar en concepto de daños. Y ahí tienes al demandante todo orgulloso en las escaleras de la corte de justicia, inflado, loco como una cabra, medio millón más pobre, pontificando acerca de cómo él ha conseguido reivindicarse. Esos tontos consiguen lo que merecen: ¡nada! No hay ganancia en tener razón; eso es ego. La única ganancia es ser libre.
No permitas que la ira se quede contigo por mucho tiempo. Es muy destructiva. En sentido metafísico es una guerra nuclear. Es mejor expresar tu enfado verbalmente que interiorizarlo en silencio. A largo plazo, te puede enfermar. Mejor aún, procesa tu ira escrutando el estallido emocional que estás experimentando. Vete a lo profundo de su significado buscando la pérdida.

Además de la ira silenciosa que sentimos a veces, también existe la ira teatral que la gente usa para aterrorizar y manipular a otros. Esa ira no es real. Es fingida, diseñada para causar un efecto. No deberías adoptar esa técnica, porque te muestra como manipulador y falso. Cuando otros la usen contra ti, a menudo es duro desenmascararlos, pues sudarán tinta y acabarán teniendo una reacción de ira real. No pueden admitir que una parte o el total de su ira es puro teatro para su audiencia.

La personalidad humana es a menudo encubierta y deshonesta. Es adepta a manipular situaciones y personas en su favor.

Es raro el personaje que no tiene nada que defender, ni una agenda escondida que esté intentando satisfacer. Es incluso más raro encontrar a alguien que te diga abiertamente lo que piensa o quiere. Para encubrir sus intenciones reales, que pueden asomar en cualquier momento, la gente miente o dice medias verdades. Intentan oscurecer el asunto que les concierne o usan la emoción para validar una posición dudosa o deshonesta.

Así que alguien puede decir, “Estoy muy enfadado. Realmente has herido mis sentimientos” En general, lo que quiere decir es: “Percibo que pudieras causarme una pérdida de alguna clase o me la has causado ya. No puedo permitir que sientes un precedente. Las contradicciones son una ofensa para mi ego. Culpándote por herir mis sentimientos, espero manipularte para que retrocedas en la situación actual o por lo menos prometas no volver a repetirlo en el futuro. Usando esta ira teatral y haciendo referencia a mis sentimientos, elevo la categoría de mi punto de vista en este asunto sobre el tuyo.”

La respuesta correcta es decirle a la persona que has entendido muy bien lo que está diciendo y entonces salir y no decir nada más. Si sientes que es mejor discutir el asunto con él, lleva un discurso similar a éste: “Te entiendo cuando dices que te sientes herido y enfadado, pero no entiendo por qué piensas que yo debería ser responsable por tus reacciones. Para que pueda entender mejor tu posición, ¿por qué no me explicas qué es lo que sientes que has perdido?”


REFLEXIÓN

"Cuando te das cuenta de que la mayoría de la ira es sólo una rutina teatral, puedes disminuirla a la irrelevancia que merece. Todo enfado proviene de una pérdida. Toda pérdida es un asunto de seguridad. Todo asunto de seguridad es una manifestación del ego. Comprende eso y la mayoría de la ira se vuelve innecesaria."

martes, 8 de junio de 2010

Sanando la Culpa





CAPÍTULO 7
STUART WILDE


La culpa es tonta, auto indulgente y débil. A menudo es la punta del iceberg emocional de una auto imagen pobre.

No viniste a la Tierra porque seas perfecto, más bien al contrario. Viniste porque necesitas aprender lecciones que están disponibles aquí. Si sientes que has fallado en algunos aspectos de tu vida, todo eso significa que participaste en el seminario de la vida y cogiste el mensaje.

No hay pecado real, sólo alta energía y baja energía. Si tus acciones fueran menos que buenas, podrías perdonarte a ti mismo y proponerte hacerlo mejor la vez siguiente. Probablemente no habrá una próxima vez. Normalmente sólo tienes que “cagarla” una vez para coger el punto. Ciertamente podrías haber actuado mejor, pero no lo hiciste. Perdónate. No eres un gracioso ángel. Si lo fueras, no estarías aquí.

El pasado es pasado y no puede arreglarse. La única tragedia es cuando arrastras una memoria negativa de ello hacia el futuro. Absuélvete. Si hace falta, crea una ceremonia solemne, enciende una vela, di una oración o medita, y libérate a ti mismo de “cagadas” previas. Si has herido a gente de algún modo, escríbeles una carta mental y envíasela a su corazón; diles que lo sientes. O, mejor aún, déjate ver y discúlpate ante ellos personalmente. Eso es muy catártico para ellos y para ti.

No olvides que el modo en que la gente percibe está nublado por su propia programación y por lo que a menudo es una falta extrema de percepción. Ellos te ven del modo que les beneficia y confirma sus opiniones. Cómo eres tú realmente es, en su mayor parte, un secreto. Yace en lo profundo, dentro de tu Yo espiritual y, a menudo, los otros no lo ven. Aférrate a esa realidad y nunca te importe lo que la gente piense. Intentar ganar la aprobación de los demás haciendo el papel de bueno es tan sólo muchas veces, un residuo del niño interior que busca la aceptación de los padres. No es necesario para un adulto maduro.

Preocuparse de lo que piensa la gente merma el poder de tu valor. Coloca el control en sus opiniones y en sus reacciones.

Deja que la gente piense lo que quiera. Lo harán, de todos modos. No tienes que ser un político y actuar para ganar sus favores. En vez de eso, actúa tan honorablemente y correctamente como te sea posible. Tanto si la gente lo acepta como si no. Déjalo a su elección y recuerda no preguntárselo. De ese modo, no tendrás que merodear intentando averiguar qué piensan de ti, procesando sus reacciones y dándoles explicaciones. Eso es energía desagüe abajo. No te mezcles con eso.

Finalmente, la culpa es uno de los bastones emocionales que la gente usa para poner orden, especialmente en situaciones de familia. No uses la culpa para controlar a otros y nunca sucumbas a ese truco tú mismo. Reconócelo al verlo. Cuando los demás vean que no vas a jugar a la pelota, retrocederán. Una vez que te enganchan emocionalmente por medio de la culpa, es difícil soltarse. Cualquier salida que te inventes, normalmente llevará aparejada una gran lucha. El truco es apartarse amablemente y respetuosamente de su red emocional antes de que te atrapen.


REFLEXIÓN

"Suspirar por un pasado alternativo es un malgasto de energía. En el prístino mundo de tu Yo espiritual, no hay pecado ni energía negativa. Sólo hay compasión, aprendizaje, amor incondicional y perdón.
Recuérdate a ti mismo y a los que te rodean, este hecho. En la Luz de Dios, todo es sanado y visto como perfecto."

lunes, 7 de junio de 2010

Sanando la Frustracion




CAPÍTULO 6

La frustración proviene de la expectación, cuya punta del iceberg es el deseo. Utilizamos ritmos y experiencias pasadas, esperando extrapolarlos de su tiempo a algún evento futuro. A veces eso funciona, pero a menudo no lo hace. La mayor parte de la frustración se origina en intentar meter tus esperanzas y planes en marcos temporales preseleccionados que consideras necesarios para tu felicidad y bienestar. Ese no es un modo maduro de conducir tu vida.

Sabes que, en general, a las cosas tardan más de lo que crees que deberían tardar, porque es más fácil pensar en algo, que llevarlo a la práctica. Las cosas importantes siempre demoran más tiempo de lo que esperas. Eso es porque son, normalmente, más complejas, y porque, a menudo, la circunstancia o condición que deseas, te elude hasta que has madurado y crecido hasta el punto, no sólo de poder manejarla, sino reclamarla.

La otra causa principal de la frustración es la gente. Normalmente tratamos de meter a la gente en patrones que nos van bien. Eso es un ejercicio fútil de autodestrucción. Puedes, de hecho, animar a la gente, y esperar que puedan cambiar, pero, al final o los amas incondicionalmente por lo que son, o tendrás que estar de acuerdo en irte.

Cuando estaba en la veintena, tenía una empresa de ropa. Contratamos una gran diseñadora que era la estrella de la compañía. Era indispensable. Controlaba los destinos de la empresa ejerciendo poder sobre nosotros, y lo sabía. Al cabo de un tiempo, su ego empezó a revelarse vengativamente, y se volvió temperamental, caprichosa y no se podía confiar en ella. Si ella temblaba, la compañía entera temblaba con ella. Causaba problemas sin fin porque nosotros no teníamos un control real.

De ese día en adelante, decidí que no volvería a sufrir la misma situación otra vez. Ahora, nadie en mi vida es indispensable. No me engancho a ninguna situación o persona, incluyendo mi familia y amigos. Todo puede ser liberado. Nada es obligatorio. Cuando la gente sabe que esta es tu actitud, tienden a ser más equitativos y realistas. De hecho, se vuelven más diligentes y amables.
Puedes trabajar con gente, y puedes ser amable y paciente mientras crecen y responden al impulso positivo. Pero, al final, si no cambian o, en el caso de un empleado, no sigue tus indicaciones y apoya la causa, entonces has de dejarles ir. Nunca entres en una situación en que alguien sea tan indispensable que no puedas prescindir de él.

Esto es especialmente cierto en el amor, donde uno tiende a ceder el control más fácilmente. Nadie debería ser esencial para ti. Enamorarse es divertido, pero no dejes que te ciegue al hecho de que hay cinco mil millones de personajes ahí fuera para conocer. Asegúrate de que al foco de tu devoción se le recuerda constantemente que ella no es tan vital para ti, y que, aunque vosotros podéis amaros y haberos elegido, eres consciente también del vasto campo de oportunidades que se despliega justo al otro lado de la puerta.

Está bien confiar en la gente si estás realmente seguro de la persona en quien confías. Pero la mayoría de los individuos no son demasiado íntegros, especialmente bajo presión. Si has de confiar en la gente, estate seguro de que minimizas el riesgo. Nadie debería tener la llave de tu vida. Siempre me sorprende como la gente confía los ahorros de su vida a algún personaje u organización que apenas conoce. Toma muchos pequeños y calculados riesgos mejor que ponerte por entero a una sola apuesta.

Un error que cometemos frecuentemente cuando tratamos con gente es esperar que sigan igual. Los recordamos como solían ser. De hecho, la gente cambia, minuto a minuto, segundo a segundo. Sufren cambios de humor, subidas de energía, oleaje emocional y cambios psicológicos. Eso, a menudo, les hace impredecibles, erráticos e irresponsables. En muchos casos, confiar en otros significa regalar tu poder. A veces tienes poca o ninguna elección. Sin embargo, deberías diseñar tu vida para evitar esto en lo posible.

La otra fuente de frustración para muchos es la experiencia de no conseguir lo que quieren. La solución para esto es no querer lo que crees que quieres. Si no puedes manejar eso, por lo menos, desea menos cosas. Cuantas más cosas tienes que tener, más vulnerable te vuelves. Si eres maduro y evolucionado, no necesitarás nada de nadie, y lo poco que necesitas puedes proveértelo a ti mismo.

Recuerda, la mayoría de las cosas que crees que necesitas son viajes del ego destinados a mejorar tu imagen y tu percepción de seguridad. Muchas de ellas no son particularmente vitales. Gastarás un montón de energía satisfaciendo tu ego sólo para encontrarte con que tan pronto como tiene lo que quiere, ignora todos tus esfuerzos y rápidamente te tatúa otra lista de demandas sobre la frente.

El ego siempre intentará forzarte a que te esclavices por su visión. Yo no aceptaría toda esa mierda si fuera tú...


REFLEXIÓN

La frustración se origina en el desagradable hábito de permitirle al ego decidir el cuando y el cómo de sus deseos. Si vendas los ojos del ego con disciplina y nunca le muestras el menú de la vida, no se queja de la comida, sino que está encantado de estés comiendo para mantenerte vivo.”...

sábado, 5 de junio de 2010

Sanando la Confusion



CAPÍTULO 5

En nuestro vano intento por adquirir seguridad, hacemos un montón de cavilaciones. Estamos constantemente intentando averiguar qué va a suceder al momento siguiente.

La vida actual está llena de elecciones. Dado que muchas cosas son impredecibles, hacer la elección correcta es a veces un proceso difícil. La confusión es endémica en las tribus occidentales. Millones de horas humanas se dedican a este proceso.

La confusión es un juego de la mente que nubla tu conocimiento interior y te hace vacilar. Hace posible la acción indecisa, el razonamiento pobre y la inestabilidad, que se manifiesta como un conducta errática y estrés. Cuando estás confuso y no comprometido, tus resultados resultan pobres o bien fallas completamente.
¿Te gustaría eliminar la confusión de tu vida completamente?
¿Sí o no?

Si tu respuesta es no, por favor, pásate este párrafo. Si tu respuesta es sí, sigue leyendo.

La confusión surge primero y principalmente de las preguntas. No puedes sentirte confuso a menos que primero te hayas hecho una pregunta. Si quieres ser serio eliminando la confusión, empieza por reducir el número de preguntas que te haces a ti mismo.

Sí, puedes reflexionar sobre tu vida. Y sí, meditar y sentir las cosas que pasan. Pero es la diarrea de preguntas que te haces a ti mismo la que te vuelve loco.
Haz esto: Acuerda, de hoy en adelante, que vas a eliminar el 90 por ciento de todas tus preguntas. Luego comprométete a no tomar decisiones solamente con la lógica y el intelecto. Utiliza tus sentimientos, incluso si te parecen ilógicos a veces. Dadas dos o tres alternativas, o bien vas a saber a través de tus sentimientos, qué dirección tomar o estarás dudoso.

Sí sabes, ve hacia allí.

Si no sabes y tienes que darle vueltas a las opciones en tu cabeza arriba y abajo durante días, ninguna de las posibilidades ofrecidas puede ser adecuada en este momento, de todos modos.

Tal vez nunca sean adecuadas. La decisión debería ser natural y venir del corazón. Si no se siente bien y no estás seguro, no hagas nada.

Observar y esperar es mi manera. Sin embargo, si tienes que aproximarte a las cosas intelectualmente porque ese es tu hábito, entonces más que darle vueltas y sentirte confuso, recolecta información. La mayoría de la gente que toma decisiones lógicas intelectualmente, sufre golpes por falta de información. Nunca avances tus tropas hacia un valle sin enviar unos pocos soldados hacia la colina. No querrás entrar en situaciones de inferioridad numérica, desventaja e inseguridad.

Aquí van unas pocas ideas acerca de los conflictos, que, después de todo, son una gran fuente de peso mental. Mi método preferido es evitarlos, mediante la observación de todo, todo el tiempo, y tomando acción correctiva temprana. O no soltando el control en primer lugar, que es como la mayoría de los problemas afloran. Casi siempre los conflictos son variadas formas de las luchas de poder del ego.

Mi siguiente movimiento es siempre intentar irme antes de que el conflicto se ponga en marcha, y estar de acuerdo con liberar lo que quiera que sea en que se base el conflicto.
Mi tercera recomendación es sólo para las situaciones en que el conflicto es realmente inevitable. Primero evalúa tus oportunidades de éxito. Nunca entres en situaciones donde ganar sea dudoso. Si sabes que seguro que ganarás, empieza fingiendo que te retiras, y saca la emoción de la situación. Tu retirada fingida hace a los demás bajar la guardia.

Entonces, calladamente reúne toda tu fuerza. Cuando estás preparado, y no antes, entra en conflicto con el elemento de la sorpresa, y con toda la fuerza de tu poder y tu concentración. Todas las armas en alto. Nunca uses un mazo para cascar una nuez si puedes usar un martillo neumático de diez toneladas. Las victorias deberían ser rápidas, incruentas y completas de la manera más eficiente.


Intenta también ofrecer a la oposición una rendición honorable. Ese es el modo más amable. Es gracioso y espiritual permitir a sus egos una ruta de escape intelectual. Tú no quieres destruir gente. El objeto de este viaje es expandir la bondad. No estás aquí para juzgar ni castigar a los otros.

En relación con la confusión, recuerda esto: Todo desprende energía. Cuando tus sentimientos no pueden interpretar una situación apropiadamente, eso te dice que al as circunstancias que estás considerando les falta energía. O la situación es equivocada para ti, o no estás preparado, o este no es el momento adecuado.

Lo que eliges hacer en la vida no es usualmente tan importante como el nivel de poder y concentración que traes a tu acción y el momento que eliges para ejercer ese poder. El momento y la acción concertada son las claves del éxito. Seleccionar la dirección es terciario, tras el momento y el poder.

Ayudando a otros a resolver su confusión, nunca preguntes a los individuos qué es lo que ellos piensan, siempre pregúntales cómo se sienten acerca de ese asunto. Entonces, pregúntales qué quieren. Ayúdales a descubrir si lo que ellos realmente quieren es lo que ellos piensan que quieren. Como he dicho, la mayor parte de los deseos son ego.
Luego, llévalos a analizar si sus deseos son razonables, dada su energía y sus circunstancias. Y, finalmente, ¿es eso probable? La mayor parte de los individuos son soñadores profesionales que, de hecho, sólo necesitan el sueño, ellos no necesitan la responsabilidad o la acción que se requiere para materializar sus sueños.

Cuando un sueño se hace realidad, la experiencia de ello cambia naturalmente. Usualmente, es una decepción comparada con la visión. La idea de sus sueños realmente convirtiéndose en una parte de sus vidas a menudo es algo que les hace sentir preocupados por no ser capaces de conseguirlo. Así que, muchos se aseguran de que ellos nunca están disgustados por no rendir lo suficiente o por seleccionar acciones que aseguren que sus sueños seguirán siendo justo eso, sólo un sueño.


REFLEXIÓN

La confusión es una manifestación de un intelecto inestable. El intelecto es dominado por el ego. Por lo tanto, la confusión es mayormente el parloteo del ego hostigando tu vida. Entrena al ego para que haga menos preguntas y responda a la mayoría de las preguntas de los demás con un “No sé, y no me importa”...

viernes, 4 de junio de 2010

Eliminando el Miedo



CAPÍTULO 4: ELIMINANDO EL MIEDO MEDIANTE LA PERCEPCIÓN

La mayor causa de angustia es el miedo. Tu primer paso para conquistar el miedo es aprender a no tener miedo del propio miedo. Empieza por verlo como tu amigo, no tu torturador. Está bien estar asustado a veces. De hecho, el miedo te mantiene a salvo. Agudiza tu percepción y te permite ejercer acción correctiva cuando es necesario. Todo miedo enraíza inicialmente con el miedo a la muerte.

Es la muerte de las cosas la que nos asusta. No la muerte física en sí, sino el fin de cosas que nos son familiares, el fin de una relación, de un trabajo, de un hábito. A veces es un ritmo el que está a punto de cambiar, o tu domicilio, o un sentimiento o certeza a los que estás aferrado.

Resistimos el cambio. Aunque el cambio es el modo espiritual en que el universo nos mantiene vivos y frescos. Vivimos en un mundo que se desarrolla rápidamente. Si no estás cambiando es que la vida está dejándote atrás. Las cosas serán más duras, no más fáciles.

Una vez que aceptes el cambio y los finales, y no los veas como afrentas personales, la mayoría del miedo se disipará. Intentar seguir en circunstancias y condiciones de energía agotada te extenúa.

Recuérdate constantemente lo que ya sabes: Nada está garantizado. No tiene que estarlo. Puedes estar equilibrado en cualquier circunstancia.

El miedo al cambio y el miedo a lo desconocido son enfermedades del ego. No tienes que saber qué sucederá en el futuro para sentirte seguro. De hecho, cuanto más evoluciones y expandas tu consciencia, más impredecible se vuelve la vida. Cuanto menos cierto eres, más alto has llegado.

Los ritmos agradables rutinarios son manifestaciones del intelecto. A menudo aburridos y asfixiantes, son sólo adecuados para los perezosos o aquellos con poco coraje, que prefieren existir en una confinada área defendible donde nada inesperado pueda suceder. Peces importantes en pequeños charcos, nadando en sus propios efluvios.

Tú no necesitas un charco, tampoco hay mucho oxígeno es un estanque. Elige un río. Fluye y marcha. No temas, ten fe. Deja que la energía de la vida te lleve espontáneamente de un paso al siguiente. Gánate la libertad. Alcanza el mar abierto. Todo irá bien.

La resistencia a cambiar es mayormente ego.

Si tu ego se asusta, ridiculízalo. O bien háblale y dile que todo va bien. Entonces pasa a tu lado espiritual. Abraza el espíritu, como él te ha abrazado a ti desde el comienzo de los tiempos, en el cálido brillo de su luz celestial. Ése es el camino heroico.


REFLEXIÓN

Todo miedo no es más que el ego esperando una próxima contradicción. La mayor parte del miedo no es real. Disipa su poder rehusando “comprar” la emoción. Hazlo tu amigo. Acomódalo como ayudante y aliado, y la mayor parte de tu miedo cambiará o desaparecerá completamente.

jueves, 3 de junio de 2010

Emocion y Deseo




CAPÍTULO 3

Cuando las ideas se reúnen en tu mente para formar una opinión, y
cuando esa opinión consideras que es agradable y placentera, tu
personalidad apoya esa opinión revistiéndola con emoción.
Usando la emoción, el ego toma una idea (opinión) y la hace especial,
más real y más importante.

La emoción es la herramienta que utiliza la personalidad para darle
credibilidad y valor a sus opiniones. Así es como la personalidad se
siente importante. Así es también como la personalidad consigue lo que
quiere. Puede empuñar la emoción como un bate de béisbol, manipulando
a otros para que reaccionen a sus necesidades y deseos.

Aprendemos el truco desde pequeños. Un poco de teatro, una rabieta de
mal genio, aullando a 120 decibelios en el medio del supermercado,
funciona maravillosamente cuando queremos un helado. La emoción era el
modo de hacer que los mayores nos hicieran caso.

Cuanto más insignificante se siente la gente, más buscan fortalecer su
vulnerabilidad mediante el uso de la emoción.. Se bañan en ella,
hablando constantemente de sus emociones, haciéndose especiales.
También serán fascinados por las emociones de los demás, incrementando
su necesidad, discutiendo constantemente asuntos emocionales, mirando
shows emocionales en la televisión, viviendo en la emoción de los
eventos locales y mundiales junto con las reacciones momentáneas que
tienen en sus propias vidas. El proceso les hace sentir mejor
provisionalmente.

Sin embargo, hay varias contrapartidas en el uso de la emoción de este
modo. Digamos que ves un noticiario en la tele acerca de una guerra, y
te crees la emoción de todo eso. Incluso si tu mente consciente sabe
que no estás implicado, surge una contaminación inconsciente que te
hace sentir menos seguro y más vulnerable. Mirar como reaccionan los
demás a las situaciones que están fuera de control, te recuerda la
posibilidad de tu propio colapso.

Aún más, cuanto más te permites a ti mismo estar fuera de equilibrio
emocionalmente en tus propios asuntos, mayor se hace el contenido del
ego. Cuando la personalidad tiene una gran parte de sí misma invertida
emocionalmente en un asunto, cualquier contradicción de su posición se
ve como un gran trauma personal o una gran amenaza.

La emoción eleva los asuntos del ego a la mayor importancia. Concede
al ego el poder.

La demás gente reacciona a nuestras emociones, especialmente a las
negativas. El ego cree que si los demás le consideran importante, eso
le hará más especial, menos vulnerable, y por lo tanto, más seguro.
Cuanto más poder reúna el ego, más gente lo verá diferente, elevado
por encima del rebaño, divino, y más allá del asunto central del
hombre, que es la muerte. A veces el uso de la emoción no es más que
la personalidad buscando evitar lo que ve como una muerte por
insignificancia.

Usar la emoción, inicialmente, nos ayuda a sentirnos más seguros. Pero
realmente, el colocarnos arriba nos hace experimentar una mayor
inseguridad y una afrenta personal cuando las cosas se ponen feas.
Experimentando la vida, te formas gradualmente hábitos y estableces
preferencias que se desarrollarán esperanzas y expectativas. Una
esperanza o expectativa es, de hecho, una opinión; cuando vinculas
opinión con emoción, generas deseo. Cuando la vida contradice tus
deseos emocionalmente enraizados en profundidad, tiendes a tomártelo
más personalmente que cuando una esperanza te es denegada.

Así es como el proceso funciona en la práctica. Comienzas con una vaga
esperanza tal como “me gustaría tener un día libre”. A su alrededor
comienzan a flotar ideas que respaldan esa esperanza. “Tengo derecho a
un día libre; he trabajado duro”. Ahora, la personalidad selecciona de
la memoria y razona argumentos que justifiquen su opinión y hagan
correcta la idea. Sin embargo, la esperanza aún no tiene un peso real,
está aún en proceso de desarrollar masa vía argumentos personales y
diálogo interno. Así que para dotar a la idea de importancia real, tu
personalidad empezará a implicarse a sí misma en la idea mediante el
vínculo con la emoción. El asunto del día libre comienza a convertirse
en una parte vital de la afirmación propia de la personalidad.
“Necesito un día libre. Estoy desesperado por tener un día libre. La
vida me debe un día libre. Los demás tienen tiempo libre. Soy una
buena persona, una persona importante; mi salud se resentirá si no
tomo un día libre. Tener un día libre es justo y apropiado” Etc. etc.
Digamos que la realidad es que tienes un montón de obligaciones, y que
las circunstancias no te permitirán darte el lujo de un día libre.

En este punto, el ego estalla, tomándose el asunto muy personalmente.

Verá la negativa como una afrenta personal y un ataque a su integridad
y estabilidad. Esto empezará a erosionar la sensación de seguridad del
ego. El deseo incumplido se convierte en una afirmación de la falta de
poder de la personalidad. La última pérdida de poder de la
personalidad es la muerte. Así que “el día libre en el trabajo” es
ahora subconscientemente un asunto de vida o muerte.

La personalidad comienza a emitir debilidad a través de su
inseguridad, y su fuerza psicológica y metafísica se derrumba
rápidamente. Del rico tapete de la vida fluyen circunstancias que
confirman y sostienen la autopercibida debilidad.

El cuerpo físico reacciona a los mensajes generales de debilidad, y
ahora sientes los comienzos de un espantoso resfriado nasal. El coche
no arranca. Tu jefe te carga incluso con más trabajo; una factura que
no puedes pagar se cuela en tu buzón. Ahora puedes sentirte realmente
una víctima. Cientos de inseguridades se desencadenan en tu mente. La
reacción natural es sentirse amenazado. Surge la ira. Hay que
encontrar culpables. Alguien tiene que estar haciéndote esto. Emergen
guerras interpersonales. ¡Es un zoo!

La emoción y el peso de todo el conjunto pueden quedarse contigo
durante días o más, hasta que la personalidad experimenta una
elevación o ganancia que le permita superar la situación y sentirse
segura, que vale la pena y feliz. A todo este embrollo se le puede
seguir la pista hacia atrás, hasta un pensamiento que tuviste el
último jueves que decía: “me encantaría tener un día libre”.
Es maravilloso cómo funciona este sistema. Empezamos con una idea
vaga; la respaldamos con razonamientos que nos confirmen la idea a
nosotros mismos. Entonces la enlazamos con la emoción y nos volcamos
en ella. Luego entramos en un absurdo juego de poder emocional, como
si nos fuera la vida en ello, para intentar conseguir lo que queremos.
Cuando las circunstancias no nos creen, quedamos devastados.
Si el contenido emocional que vinculas con una idea es sostenido
durante un periodo de tiempo, y si el deseo te es negado
continuadamente, eso puede llevarte al anhelo. En términos
metafísicos, anhelar es tener fuerte inclinación hacia una idea, tal
vez una esperanza.

Como he dicho en mis otros libros, inclinarse emocionalmente hacia tus
sueños realmente te aleja de ellos. La emoción de tu deseo crea un
hueco metafísico entre tú y la condición o escenario que deseas,
haciéndote más difícil que lo atraigas. El hueco se establece porque
tu anhelo es una afirmación poderosa que establece categóricamente que
“No tengo esa cosa que estoy anhelando”.

Afirmando constantemente que no tienes lo que quieres, deterioras y
sacas poder a lo que tienes. Y aún más, construyes con tu energía
metafísica sutil un patrón, como una huella dactilar, que es
discordante con la propia cosa que deseas.

Hay una consideración más: La cosa que deseas, fama, éxito, dinero,
romance, lo que sea, generalmente vendrá a ti, en parte, a través de
las acciones de los demás. Son nuestros compañeros humanos quienes
ayudan a llevar a cabo tus deseos desde la nebulosa metafísica de las
posibilidades a tu realidad inmediata, donde vas a disfrutarlos.
Suspirando por nuestros deseos no hacemos autoindulgentes. La
autoindulgencia molesta a la gente. La detectan y se sienten como
obligados. No les gusta la carga añadida de tu peso emocional
cayéndoles encima. Les recuerda las veces que ellos necesitaban cosas
y les eran negadas. Reaccionan sintiéndose los desposeídos, víctimas
de tu indulgencia. Ellos te lo negarán, esperando controlarte o tener
poder sobre ti. Haciendo eso esperan que salgas de lo que ven como tu
opinión poco razonable.

Además, suspirar y anhelar puede llegar a ser obsesivo. La obsesión es
una seria enfermedad del ego; crea peso emocional, cegándote para ver
las oportunidades que ya existen. También te vuelve apático. Afirmando
constantemente que no tienes lo que deseas, el cuerpo empieza a creer
que no tiene lo que necesita. Eso lo debilita. Anhelando
continuamente, el ego finalmente entra en un vacío estancado, y la
falta de energía gradualmente devora el cuerpo. Si la condición
persiste, finalmente te matará.

No anheles, actúa. Tómate 15 minutos diarios para visualizar, como si
estuviera dada, la condición o circunstancia que deseas. Crea un
escenario mental, mírate con el objeto de tu deseo. Conviértete en
parte de él, deja que sea parte de ti. Permítele ser tú. Entonces
levántate y ve a hacer algo que te mueva hacia tu sueño; algo poderoso
y positivo.

Recuerda, tú tienes que ir hacia tu sueño. Es muy improbable que, sin
ayuda, tu sueño te encuentre. No es imposible, pero pudiera ser que
tuvieras que esperar largo tiempo, tal vez por siempre.

A propósito, si quieres incrementar la intensidad de tus
visualizaciones y tus meditaciones, lee el capítulo
“Turbo-pensamiento” de mi libro “The Quickening”. En él hablo de cómo
usar el calor sexual de Kundalini para vincular tus visiones con el
poder metafísico que es prácticamente imparable.

Por favor, date cuenta que, si el objeto de tu deseo es que otra
persona debe actuar de cierto modo, trabájalo y visualízalo, pero
recuerda que ellos tienen su propio patrón de destino y puede que no
coincida con lo que deseas para ellos.

Si tu pudieras esperar, soñar y querer cosas sin envolver esas ideas
con la emoción, serías muy feliz. No reaccionarías si la vida te
hiciera esperar o si la vida te denegara algo completamente. Te
sentirías uno y en equilibrio todo el tiempo. Es la emoción que
introduces la que te hace triste y levanta contradicciones. Cuanto
menos te implicas emocionalmente, menos dolor sufres.

REFLEXIÓN

No uses la emoción como una herramienta autoindulgente para llamar la atención o para parecer, tú o tus ideas, importante. En su lugar, actúa poderosamente y de modo preciso. Sé activo. Crea energía; deja que los demás te necesiten en vez de necesitarlos a ellos y actuar para ganar su aprobación.

miércoles, 2 de junio de 2010

Contradiccion y Expectativa



  • CAPÍTULO 2


    Hay un triple beneficio cuando entiendes cómo te afectan estas contradicciones de la vida.

    Primero, puedes eliminar algunas inmediatamente.
    Segundo, puedes diseñar tu vida de modo que evites la mayoría de ellas.
    Tercero, puedes desarrollar herramientas que te permitan aceptar, sin emoción, aquellas contradicciones que no puedes evitar.

    Haciendo estas tres cosas, vuelves a tu divino estado natural: sereno, feliz y entretenido por la maravilla y la gracia de este extraño regalo que llamamos vida.

    ¿Cómo nacen estas contradicciones?

    En su mayoría son inherentes a nuestra programación. La personalidad humana existe en un extraño ciberespacio, flotando sobre el suelo a unos 150 ó 180 cm, o ligeramente más, atrapada en tierra de nadie, en algún lugar en el cerebro.
    Extraño ¿verdad?. Nosotros creemos que estamos aquí. De hecho, ¡somos un hovercraft (aerodeslizador) sin tren de aterrizaje!. La personalidad humana realmente no aterriza nunca. Incluso si estás vertical sobre tu cabeza, tu personalidad está aún en algún lugar más allá del grosor de tu cráneo sobre el suelo. Esto provoca una incómoda contradicción.

    Tu personalidad tiene que usar el cuerpo como vínculo entre el ciberespacio infinito en el cual reside, y la dimensión terrestre de la que surgen sus experiencias.
    El cuerpo es finito. La muerte es la extrema contradicción final. Es natural, por ello, que la mayoría de la gente se sienta un poco insegura.

    La vida, para muchos, es un fútil intento de llegar a sentirse seguros en una dimensión que es intrínsecamente insegura. La gente lucha constantemente contra eso, en vez de aceptar lo extraño de las lecciones humanas como una cosa hermosa. Dios debe tener un maravilloso sentido del humor -las contradicciones de la vida son imponentes, divertidas y muy interesantes. Me resultan heroicas.

    *Tenemos que abrazar el infinito dentro de un cuerpo mortal.

    *Tenemos que creer en un dios que no podemos ver.

    *Tenemos que aprender a amar en una dimensión donde hay tanto odio.

    *Tenemos que ver abundancia cuando la gente habla constantemente de escasez y carencia.

    *Tenemos que descubrir la libertad donde el control es la religión estatal.

    *Tenemos que desarrollar autoestima mientras la gente nos critica y nos empequeñece.

    *Tenemos que ver belleza donde hay fealdad.

    *Tenemos que adoptar la amabilidad y las actitudes positivas cuando estamos rodeados de incertidumbre.

    *Tenemos que sentirnos seguros a pesar de nuestras preocupaciones.

    Sí, el heroísmo de nuestra condición es adorable.

    La trascendencia no es más que aprender a aceptar las contradicciones de la vida sin resistencia.

    Aceptar estas contradicciones no es algo natural para nosotros. De hecho, de niños nos enseñaron a resistir. Así, por ejemplo, cuando eras niño fuiste programado para creer que estar mojado y frío era una experiencia negativa. Si tu madre te dejó alguna vez bajo la lluvia, probablemente reaccionaste emocionalmente y lloraste. Ahora, como adulto, puede que tengas la misma reacción negativa programada a estar mojado. A su alrededor giran todas las variables: La lluvia arruina tu ropa y tu peinado, la lluvia es incómoda cuando te cae por el cuello, la lluvia es fría, el frío te pone malo, etc. etc.

    En consecuencia, una masa de energía en tu mente dice: “Tenemos que estar calentitos y confortables para sentirnos positivos, felices y seguros”. Entonces aparece la lluvia. Ahora diluvia y estás a kilómetros de un refugio. De repente, las circunstancias –el frío y la humedad- contradicen tu opinión o deseo.

    Ahora, dos masas han establecido una relación en tu mente, cada una atrae a la otra. La emoción negativa fluye desde la contradicción generada por la lluvia fría. Pero, ¿es la lluvia la que es negativa? ¿O es tu reacción a la lluvia la que causa la contradicción?. El agua cayendo de arriba no tiene cualidad intrínseca, negativa o positiva. Cuando te duchaste esta mañana no te quejaste ni aullaste.

    “¡Ah! Pero era agua caliente.”
    “Así que es la temperatura del agua lo que te molesta ¿no?”
    “Precisamente”

    Pero ¿qué pasa si aceptas que el agua fría es parte de la vida?. A veces llueve. Puedes enfadarte y resistirte, o puedes relajarte y “hacer lluvia”, como yo le llamo. Las circunstancias no han cambiado, tu reacción, sí. Tan pronto como estás de acuerdo en “hacer lluvia” y dejas de resistir, la lluvia se vuelve más cálida y confortable gradualmente. Finalmente, puedes “hacer lluvia” indefinidamente e incluso disfrutarlo.

    Si nunca has “hecho lluvia”, prueba esto: Saca tus mejores vestidos, incluidos tus zapatos caros, y espera. Cuando empiece a llover, vístete y sal a pasear calmadamente, cabeza alta. Sin inmutarte. No tengas opinión, sigue caminando, ama la lluvia, acéptala, hazla tu amiga.

    Al final tu resistencia caerá a cero. La lluvia desaparece en tu mente de todos modos. Mientras “haces lluvia” puedes divertirte viendo como otros “no hacen lluvia”. Hay un rato de diversión en ello.

    Si no puedes obligarte a “hacer lluvia” inmediatamente, por lo menos haz que el ego, regularmente, haga cosas que le contradigan. E4mpieza con poco. Toma duchas de agua fría. Regala tu abrigo; usa menos ropa.

    Deja de hablar del clima también. No comentes sobre sus condiciones, sólo experiméntalas. Después de todo, cuando la gente dice que hace frío ¿qué quieren decir?. Indican que hace más frío que sus expectativas. En efecto, no hay calor ni frío, solamente la temperatura sube y baja a veces.

    Todas las circunstancias de la vida, como la lluvia, son neutrales. La vida no tiene más cualidad negativa o positiva que las etiquetas que le ponemos. No lo olvides nunca.

    Incluso la muerte es neutral. No tenemos modo de saber cómo reaccionaremos a la muerte. Quizás la vida es realmente de poca calidad comparada con la muerte. La angustia “mucho ruido y pocas nueces” que sufrimos, es probablemente para nada. Tengo la secreta sospecha de que graduarse del plano terrestre puede ser algo muy a celebrar.

    Es la expectiva programada la que nos enfada y causa dolor. No las circunstancias.
    Las expectativas hacen posible las contradicciones.

    Sí, esperamos lo mejor, pero debemos aprender a no reaccionar cuando no conseguimos lo que queremos. Si eres diligente y te concentras y tomas la acción correcta, probablemente en la mayoría de los casos obtendrás el mejor resultado. Pero debes amar la vida y aceptarla cuando no marcha a tu manera.

    Sé heroico, conviértete en un guerrero. Cuando afrontes una situación adversa, no reacciones, sólo acéptalo. Actúa con calma. Actúa con poder. Si no sabes qué hacer inmediatamente, no hagas nada, espera hasta que la respuesta venga a ti.
    Sé maduro y aparta la emoción de las situaciones. Actúa con la mayor determinación posible dada la situación. Puedes entrenar fácilmente a tu personalidad para que “haga vida” en vez de luchar contra ella. No seas un cobarde auto indulgente. A veces la vida no es confortable, ni segura ni garantizada.

    ¡Es tan simple!. Son nuestras atontas expectativas y la auto importancia del ego las que demandan que las cosas han de ser de un modo y no de otro. Eso es lo que nos causa todo el dolor, no la vida en sí misma.

    La vida es en gran parte cosa de ir adivinando. Generalmente vas acertando más o menos correctamente; otras veces te equivocarás. Cuando te equivoques, no reacciones, ama tus errores y no te maltrates.

    ¡Eh! Pensaste que había suficiente gasolina en el coche pero no era así, por tanto ahora estás “haciendo camino”. Pues eso.

    Sólo camina.


    REFLEXIÓN

    Las circunstancias de la vida no tienen cualidad alguna, ni negativa, ni positiva. Son neutrales. No las resistas, incluso aquellas que te asustan tontamente. Cuando te enfrentes con la adversidad, compra la solución, no la emoción.

    Enseña esto a los demás...

martes, 1 de junio de 2010

Opinion y Sentimiento





Vuelve a tu estado natural; sereno, feliz y entretenido por la maravilla y la gracia de este extraño regalo que llamamos vida.

CAPÍTULO 1: OPINIÓN Y SENTIMIENTO
Conforme caminas por una calle de una ciudad y miras la realidad, todas las cosas que ves - edificios, casas, coches – son, de hecho, una manifestación externa de la opinión de alguien. Un edificio está situado donde está, tiene la forma que tiene, porque alguien opinó que había que construirlo de ese modo y situarlo en ese lugar concreto donde se halla.

La realidad interior –nuestra percepción de la vida, la psicología y la metafísica de nuestra humanidad- está construida del mismo modo. Está formada únicamente de opinión. Percibimos aquello que creemos.

Heredamos de otros, en su mayor parte, las opiniones y sentimientos generales, o los construimos a partir de experiencias comunes. Eso nos hace predecibles. Esas opiniones forman y definen nuestra realidad. Son tan reales y tan sólidas como la gasolinera de la esquina.

En este librito observaremos las opiniones prevalentes en nuestra psicología de masas y cuántas de ellas nos causan angustia. Con unos pocos y simples giros de la mente y un poco de entendimiento psicológico y espiritual, puedes liberar el 95 por ciento de toda la angustia. Probablemente tengas que seguir eventualmente con el otro 5 por ciento por el momento.

Pero gradualmente irás descartando ese último 5 por ciento y te liberarás a ti mismo de las opiniones que has adquirido de los demás, así como de aquellas que has establecido por ti mismo.

Esto te liberará de la emoción colectiva y la angustia que te proporcionan. La serenidad fluye naturalmente desde una percepción elevada. Procesas y comprendes las cosas de un modo diferente.

Si te gusta el crecimiento espiritual, la integración psicológica y la sanación personal por la vía rápida, como a mí, entonces este pequeño libro es para ti.

El peso se define como la gravedad ejercida cuando una masa particular se acerca a otra. Tu peso físico es establecido por la masa de la Tierra. Si tienes sobrepeso, puede que no sea tu culpa en absoluto, después de todo; ¡podría ser que el planeta estuviera desequilibrado y ejerciera demasiada gravedad sobre ti!.

Los científicos no nos pueden decir exactamente qué es la gravedad. Ellos postulan que está causada por unas diminutas partículas llamadas gravitones. Como por ahora no podemos encontrar los gravitones, no lo sabemos con seguridad. Pero podemos observar lo que hace la gravedad.

La gravedad es, de hecho, la expresión de una contradicción. Un masa enorme, como la de nuestro planeta, contradice a una masa menor como la de nuestro cuerpo, forzándola a permanecer dentro de su campo gravitatorio, de su influencia gravitacional.

Es interesante que usemos la misma palabra para la fuerza de la gravedad y cuando se trata de algo muy serio. Cuando decimos que algo es grave, queremos decir que nos impacta emocionalmente y nos afecta negativamente. Sentimos la presencia de una masa psicológica ejerciendo su gravedad sobre nosotros. La emoción negativa y la fuerza de la gravedad son realmente dos manifestaciones de la misma fuerza.

El peso mental y emocional que tu experimentas como estrés o angustia, es exactamente como la fuerza de gravedad. Surge cuando dos masas psicológicas dentro de tu mente establecen una relación contradictoria una con otra. Tus reacciones a las circunstancias del día a día forman una masa en tu mente, mientras que las ideas existentes alrededor de tu opinión forman la otra masa. A través de estas dos masas fluye una tensión psicológica que genera una reacción emocional.

Para que las circunstancias de la vida generen una emoción negativa, tienen que contradecir tu opinión. Si las circunstancias no contradicen una de tus opiniones, tu reacción es neutral. Cuando las circunstancias refuerzan tus opiniones, te proporcionarán una emoción positiva.

Por lo tanto una emoción negativa (peso psicológico) sólo es posible cuando existen en tu mente dos fuerzas mentales opuestas.

Imagínalas como dos grandes rocas. Una está construida de ideas ligeramente interconectadas que se agrupan en tu mente por afinidades. Se mantienen juntas y se hacen sólidas por razones personales, y forman tu opinión- tus expectativas. La otra roca está creada por tu percepción y tu reacción a las circunstancias de la vida. A menudo se yuxtapone a la primera masa, contradiciéndola.

En consecuencia, una emoción negativa no es más que la experiencia de ser contradicho. Tú tienes ciertas opiniones y expectativas; la vida viene y contradice dichas opiniones, generando así la emoción negativa.


¿Cómo surgen esas expectativas y opiniones?

Al igual que una roca está hecha de una serie de átomos que le dan masa, cuando tus pensamientos e ideas se agrupan en torno a un asunto personal, generan gradualmente una masa psicológica en tu mente.

Para que esa masa ejerza poder sobre ti ha de haber una opinión subyacente que mantenga unido todo el conjunto. Esa opinión fluye generalmente de alguna necesidad personal que tú crees que es importante.

La opinión es como el núcleo de un átomo –es una fuente de poder mental. Tus ideas orbitan alrededor, como las partículas subatómicas circundan un núcleo. Conforme ellas giran en torno a tu opinión, las razones personales que dan, van reforzando el conjunto. Cuando un número suficiente de ideas similares se reúnen para formar una sólida opinión, establecen una masa psicológica en tu mente. Esa masa es extremadamente sólida y difícil de mover.

La personalidad humana se basa en estas masas psicológicas que le dan solidez. Es vital para tu personalidad, sentir que es correcta y apropiada, y que las ideas que mantiene son santas y buenas, y, por encima de todo, que están en lo correcto; que tienes razón. La gente con ideas locas e irracionales a menudo son capaces de llegar muy lejos para justificarlas.

De la masa psicológica creada por tus opiniones surge el punto de vista que tienes sobre cualquier asunto particular. De esa impresión devienen los sentimientos que denominamos emoción.


El punto crucial de toda angustia reside en este tema de la opinión y la contradicción. Una vez que lo entiendes y ves cómo afecta tu vida y tu bienestar, puedes liberarte para siempre.

Si quieres una existencia poderosa y gozosa haz un esfuerzo para dominar este asunto de la contradicción y serás libre.


REFLEXIÓN

*Si tu personalidad fuera programada para aceptar las contradicciones como algo natural, y no reaccionara, tú no podrías experimentar emociones negativas ni angustia.

"PÉRDIDA DE PESO PARA LA MENTE"
Autor: Stuart Wilde.